La figura (Viviana Portillo)


Serán aproximadamente las siete, no tardará en entrar por esa puerta, si viene, porque últimamente... se ubicará en la misma mesa (la de al lado de la ventana que da a la calle). Ya sentado, con la mochila al frente, aparecerá sobre la mesa la cajetilla de cigarrillos, le echará un vistazo al celular y lo volverá a guardar y, lo más importante, sacará el libro; me pregunto con qué criterio escogerá su lectura, tal vez por autor o quizás por temas. ¿Cuál será su historia favorita? ¿Le gustaría la filosofía, los cuentos, las novelas o, tal vez la poesía? (hay muchos que se nombran poetas por este lugar), y no perderá la oportunidad de cruzar dos o tres palabras con algún personaje distinguido que estuviera en el local.

Su aspecto extraño, distante y su rostro melancólico atrajeron mi atención desde el primer día que lo vi, y esas manos tan blancas (ni muy grandes, ni tan gruesas con largos dedos que adornan sus muñecas, quizá ejecuta algún instrumento de la talla de sus manos. ¿Sería una guitarra? o ¿Algún otro instrumento de cuerda?, me gustaría que sea piano).


Este escrito no es mío pero me recuerda mucho a alguien y nada jeje.
Con la mano izquierda tomará el libro y, entre los dedos, un cigarrillo; con la otra señalará una frase o un verso que lo haya sorprendido; el amigo (siempre viene con alguno) tal vez asentirá en señal de estar de acuerdo o será el inicio de un largo dilema y varias tazas de café. Dicen que los que leen mucho algún día intentarán escribir (lo escuché en alguna mesa). Nunca lo vi sacar algún cuaderno o algo parecido, solo alguna que otra hoja (motivo de una nueva discusión con el amigo).

Hace días que no viene pero sigo inmóvil esperando. Recuerdo con exactitud la última vez, estoy segura que ese día, por fin, se percató de mi existencia.

Ese día, al salir me miró ¿Habrá sentido lo que expresaban mis ojos?


- Franco ¿Qué mirás?

-Esa estatua, al lado de la moza, me aterra la forma en que nos observa.

¿Dónde estás?


Me negaste tu risa. La dicha de abrazarte. No pude decirte cuanto te amaba. No supe decirlo cuando lo necesitabas...
¿Que mi vida cambiaría?

Estaba dispuesta a ese cambio, a mirar la vida diferente porque iría de tu mano.

Pero, antes de tenerte, te perdiste por un camino que tampoco yo conocía.
Y tu risa, la luz clara de tus ojos, solo fueron un destello luminoso...

Pensé...
Fue eterno mientras duró, pues pasamos mucho tiempo juntos...
Pero a la vez, fue tan fugaz ese momento, que al despertar de ese sueño no supe si en verdad logré tenerte algún día.
..
¡Elevé mis ojos al cielo, exclamando mi confusión!

Lo único verdadero fueron mis lágrimas... No estabas... Ya no...

Todo cambia


A medida que transcurre el tiempo todas las relaciones sufren cambios... Algunas de estas, se fortalecen; otras, perecen... A algunas personas las vas conociendo mejor, a otras, creías conocer, y así, van sucediendo tantos cambios, que llega un momento en el cual no sabes dónde estás ni con quiénes...

Vas por caminos que te separan de unas personas y en los mismos conoces gente que ilumina todo a su paso, haciendo de sus vidas algo más placentero... Uno va cerrando heridas y nuevos colores pintan nuestra existencia... Viejos amores, viejos amigos, viejas vivencias, dan lugar a nuevas y expectantes experiencias, que solo dieron paso a lo que vivirías hoy...


Ves como cada suceso tiene relación con otro y comprendes que todo ocurre por algo, y ese "algo", por lo general es un buen motivo para comenzar de nuevo... Que los cambios siempre son buenos; que aprendemos a vivir con ellos; que la vida tiene muchos momentos, en los cuales hay que seguir, aún sintiéndonos muertos...

Preguntas que quedan en el tintero

¿Cómo puedes terminar algo que nunca tuvo comienzo?

¿Cómo encontrarás la cabeza a algo que carece de cuerpo?


¿Cómo dejar a un costado lo que comenzó a gustarte?


¿Cómo alejarte cuando sientes ganas terribles de caer rendida en sus brazos?


¿Olvidar? ¡¡¡Pero, si tú amas con locura!!!


Quedará resignarse, recordando cada instante lo vivido.
...

Festejando haberlo conocido y lamentando que no fuera su momento...

Basta de caretas


Desde la época Stronista era un pecado capital ser acusado de "gay" y "comunista". Hoy a más de 50 años ese concepto se mantiene aún latente en la mentalidad de muchos compatriotas. Los comunistas ya no son perseguidos, pero, los homosexuales...


En la actualidad, las personas aún consideran al sexo un tabú y condenan a aquellos con tendencias diferentes. Sin embargo "el índice de gays sigue aumentando" y esta realidad es cada vez mayor. Antes se consideraba la homosexualidad como una enfermedad, pero ellos, niegan rotundamente esa hipótesis.


Es cierto que en Paraguay la cultura vigente es machista y prejuiciosa. Todo lo diferente causa repulsión. No se tiene en cuenta que detrás de un homosexual, existe una persona con los mismos derechos y necesidades que nosotros.


Muchos son los jóvenes que deben abrirse al mundo y aceptar su condición de "anormales" dentro de una sociedad marcada por la indiferencia hacia los verdaderos problemas a los que se enfrentan, y sí, muy ocupada en menospreciar y hasta arrinconar a alguien a negarse a sí mismo.


Las consecuencias son fatales. Jóvenes echados de sus casas, incomprendidos, humillados por sus familiares, vecinos, la población entera. Pero... detrás de este letal velo, también se esconden los homofóbicos, que lejos de sentir "fobia", se ven reflejados en ellos, y lamentan no poder hacer lo mismo.


Y me expreso de esta manera, pues he visto a un hombre de "familia y buen vivir", llevar una doble vida. De día un padre ejemplar, pero de noche, todo un "comepu..."

Entonces..¿que es lo que verdaderamente tiene valor? ¿que tengas una formación íntegra para asegurar que eres normal?


Pues no, señores.. Existen muchos homosexuales que son excelentes profesionales y más valientes aún, porque se enfrentaron a la sociedad sin sentir culpa alguna. Y dirán tal vez, que éstas personas son portadoras de enfermedades mortales, que son promiscuos e indeseables...


Pero... heterosexuales, también practican la promiscuidad y portan enfermedades letales. Entonces ¿por qué marginar y lastimar a unos seres humanos que solo necesitan una oportunidad para demostrar su don de gente?


Solo recuerden que en la medida que juzguemos, seremos juzgados. No pretendamos ser jueces de nadie. Habrá alguien que los juzgará y a nosotros, también.

Para nombrar tu ausencia (Manuel Argüello)


Dicen que cuando un amor se muere, una estrella cae.

... Y es verdad.

Aquí estoy con la estrella en mis manos,

como un yerto corazón ahíto de besos sin destino.


Aquí estoy, de pie, en este septiembre de lapachos,

así, mirando, implorando a la tarde que me asedia

rasgar sin prisa la celeste piel de mi memoria.

No puedo evitar que en esta tarde


tu recuerdo, amor, se acurruque en un sollozo.

No puedo, y tal vez ni quiero evitar que en esta tarde

mi mirada se abra hacia tu casa;

hacia mi nostalgia de tus ojos;

hacia el palpitar rosado de tus labios.


Y así, entonces, amor, todo trae tu nombre:

el pasto,
que adormeces con tus pasos, el jazmín,

que se sonroja en tu presencia; mi corazón,

que olvidó mi pecho tras el tuyo.

Ahora levanto la mirada hasta los pájaros,para medir mi soledad, para nombrar tu ausencia.

Y esta brisa que me asedia y coloquia las hojas con la arena,


desmenuza a jirones, a lentos jirones palpitantes,


la alegría mía de haberme enamorado.